El Gobierno Federal intervendrá un tramo de hasta 12 kilómetros; autoridades estatales piden coordinación y desvíos para mitigar el impacto vial
Querétaro, Qro., 5 de junio de 2025.— Las obras de ampliación y rehabilitación que se llevarán a cabo en la Carretera Federal 57, en el tramo México–Querétaro, tendrán una duración aproximada de un año, confirmó el secretario de Desarrollo Urbano y Obras Públicas del estado, José Pío X Salgado Tovar. Esta intervención federal comprenderá entre 8 y 12 kilómetros, desde la carretera hacia Bernal hasta antes de llegar a la Cuesta China, en dirección hacia la capital queretana.
El funcionario estatal advirtió que esta intervención tendrá un fuerte impacto en la movilidad de la zona metropolitana, ya que la carretera 57 funciona no solo como una vía federal, sino como una arteria de tránsito metropolitano utilizada diariamente por miles de vehículos, incluidos automovilistas locales, transporte de carga y autobuses foráneos.

“El tema principal va a ser que el flujo que no pueda salir hacia la autopista viniendo de El Marqués va a tratar de desviarse por Bernardo Quintana, por Paseo de la República o por Constituyentes, hacia el centro. Entonces sí se va a tener un impacto grande”, advirtió Salgado Tovar.
El proyecto ejecutivo contempla la ampliación de un carril adicional, para contar con tres carriles en total, así como la rehabilitación de los existentes, lo que implica trabajos de gran envergadura que podrían derivar en congestionamientos vehiculares prolongados si no se planifican adecuadamente los desvíos y la logística de obra.
Ante esta situación, Salgado Tovar indicó que el gobierno estatal ha solicitado a la Federación que no se dé inicio a los trabajos hasta que exista una logística clara, que permita disminuir las afectaciones a los conductores. Además, se ha planteado al Gobierno Federal desviar el tránsito pesado y el flujo vehicular por la carretera 57-D o el Libramiento hacia San Luis Potosí, como rutas alternas durante la duración de los trabajos.
Entre las propuestas para facilitar esta alternativa, se ha sugerido incluso reducir el costo del peaje o eliminarlo temporalmente en dichas vías, con el fin de incentivar su uso y disminuir la presión sobre la vialidad principal.
El titular de la SDUOP reiteró que es indispensable que los tres niveles de gobierno trabajen de forma coordinada, ya que una obra de esta magnitud —aunque necesaria— requiere medidas de mitigación inmediatas y efectivas, sobre todo considerando que el tramo a intervenir conecta con zonas densamente urbanizadas y de gran actividad económica.
Finalmente, Salgado Tovar subrayó que el estado se mantiene atento a las decisiones federales y en espera de una fecha definitiva para el arranque de las obras, reiterando la necesidad de resguardar la funcionalidad vial y garantizar la seguridad de quienes transitan diariamente por esta carretera estratégica.