La iniciativa legislativa busca honrar el legado de Diana Pérez, activista queretana, y proteger a animales y personas vulnerables de los efectos del ruido pirotécnico
En memoria de Diana Pérez, activista queretana y fundadora del refugio Tierra Paraíso, la organización Animal Hero, en conjunto con familiares de la activista y miembros del propio refugio, impulsa una iniciativa legislativa que busca prohibir y regular el uso de pirotecnia en todo el estado de Querétaro. Conocida como “Ley Diana”, la propuesta tiene como objetivo transformar en ley una de las principales luchas que Diana encabezó durante sus últimos años: la erradicación del uso de explosivos sonoros que afectan tanto a los animales como a ciertos sectores de la población.
Gerónimo Sánchez, director general de Animal Hero, explicó que esta propuesta nace como un homenaje póstumo a quien dedicó su vida al rescate y protección de animales en situación de calle.
Sánchez explicó que la pirotecnia representa un riesgo severo para los animales, ya que su agudo sentido del oído los hace especialmente vulnerables al estruendo que provocan los cohetes. “El ruido les causa ansiedad, desorientación, crisis nerviosas y, en algunos casos, infartos. Además, muchos animales mueren atropellados o desaparecen tras huir aterrados por los estruendos”, señaló.
La problemática no se limita únicamente a perros y gatos. El impacto se extiende a la fauna silvestre, que sufre desplazamientos y alteraciones en sus patrones de comportamiento. A ello se suman los efectos negativos en el medio ambiente, como la liberación de gases tóxicos y partículas contaminantes, y los riesgos que implican estos artefactos para personas con autismo, adultos mayores con enfermedades neurodegenerativas o personas con estrés postraumático.
Actualmente, la “Ley Diana” se encuentra en revisión por parte de la Secretaría de Desarrollo Sustentable (SEDESU), que ha mostrado disposición para tratar el tema.
“Nosotros no estamos en contra de las celebraciones. Sabemos que la pirotecnia es una tradición en muchas comunidades, pero debemos evolucionar hacia prácticas que no impliquen sufrimiento. Existen alternativas: espectáculos de luces silenciosas, drones coreografiados o fuegos artificiales sin sonido, que permiten disfrutar sin dañar”, subrayó el activista.
El refugio que fundó ha sido hogar temporal y permanente de cientos de perros en situación de abandono y maltrato, convirtiéndose en un símbolo del amor y respeto por la vida animal. Hoy, sus familiares, amigos y compañeros de lucha buscan que esa entrega se traduzca en una ley que refleje los valores que ella defendió.
Animal Hero confía en que este esfuerzo marque un antes y un después en la protección de los seres más vulnerables del estado. “Queremos un Querétaro empático, sin miedo y sin crueldad.”, concluyó Sánchez.