Este lunes, la Legislatura Estatal de Luisiana aprobó un proyecto de ley que permitirá a los jueces ordenar la castración quirúrgica para aquellos condenados por delitos sexuales contra menores.
Este proyecto de Ley Senatorial 371, aprobado con el apoyo mayoritario de los republicanos, aún requiere la firma del gobernador Jeff Landry para convertirse en ley.
La ley ofrece a los jueces la opción de sentenciar a castración quirúrgica a quienes cometan delitos sexuales agravados, como violación, incesto y abuso sexual contra menores de 13 años. Actualmente, Luisiana, junto con estados como California y Texas, permite la castración química, que implica la administración de bloqueadores hormonales como opción para estos delitos.
El gobernador Landry aún no ha declarado si firmará la ley. De hacerlo, Luisiana sería el primer estado en implementar la castración quirúrgica para violadores, con entrada en vigor el 1 de agosto.
La propuesta ha generado oposición, como Sandy Rozek, vocero de la Asociación Nacional para Leyes Racionales sobre Delitos Sexuales (NARSOL), que califica la medida como cruel, salvaje e irreversible. En contraste, la representante Delisha Boyd argumenta que muchos delincuentes sexuales son reincidentes, y ve la castración como una medida necesaria para prevenir abusos y proteger a los menores.
